Siempre he dicho hasta la saciedad que todos nuestros actos tienen consecuencias, y sinceramente eso esta muy bien cuando no te equivocas. Hoy pago las consecuencias de mis errores.
Un día te dije adiós y sin mirar atrás, con paso firme me mantuve en mi lugar quizás por cansancio quizás porque me estaba ahogando dentro de esa burbuja donde vivía. ¡Sí! Quería ver mundo, quería descubrir qué me aguardaba fuera de ti pero hoy, igual que ayer y que el día anterior y el anterior a ese también me pregunto...¡no! me doy cuenta de que aquello que yo anhelaba no tiene sentido porque no te tengo a ti.
Todos dicen que me dé tiempo, que no me preocupe, que solo es un bajón y que se me pasará y yo te juro que intento superarlo, que lucho por olvidar lo que me haces sentir pero cada día vives más presente en mí. Cuando salgo a pasear con el perro y oigo un coche que entra por mi calle el corazón se me encoge pensando que quizás seas tú que vienes a buscarme, que vienes a decirme que lo sientes que todo lo que estoy pasando lo pasas tu también, que piensas en mí a todas horas pero eso nunca ocurre; veo alejarse un coche que no reconozco y que se lleva otro cachito mas de mi esperanza.
He estado pensando que lo mejor que pudiste hacer es no dejarme ir al cumpleaños de tu amigo porque sé que no hubiera sido capaz de verte con ella, no porque sea ella, sino por no ser yo. Ahora sé que no podría soportar ver como roban los besos que aún siento míos, los “te quiero” que ya nunca me dirás y deseo que en el fondo de tu corazón sepas que esos “te quiero” que le dices a ella realmente son para mí.
Estos días he estado mil veces a punto de pasarme por tu barraca, a escondidas, solo para verte desde lejos para saber si eres feliz o si en tu cara puedo reconocer mi ausencia, como si fuera una vulgar ladrona, pero me has dicho un millón de veces que no quieres saber nada de mí y yo, aunque me muera, respetaré tu decisión porque te amo, te dejaré marchar y no te detendré porque así lo has decidido y contigo te llevarás los pedazos de mi corazón porque siempre será tuyo. Así que salí, a entretenerme y beber pero en realidad lo único que quería era cruzarme contigo por la calle, mirarte una vez más a los ojos y que tú vieras los míos y que todo a nuestro alrededor desapareciera y te dieras cuenta de que lo nuestro, como el amor de Romeo y Julieta, nunca podrá morir.
Mañana volveré a salir a pasear y mi corazón volverá a dar un vuelco al escuchar un coche pasar porque no pierdo la esperanza de que algún día, no me importa cuánto tiempo pase, vendrás a buscarme y a decirme que me amas y que lucharás por mí con todas tus armas, me dirás que no te importan mis inseguridades porque lo nuestro es más grande que todo y me dirás que lo que amas de mi son mis defectos porque desde aquí quiero que sepas que lo que más extraño son tus defectos, los que te hacen ser el hombre por el que doy mi vida entera.
Todo es un empezar…solo si es junto a ti
jueves, 24 de junio de 2010
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
1 comentario:
Unas líneas muy bonitas. ¿Vuelves a poner en marcha el blog?
Publicar un comentario